Por Ron THOMAS
San Bernardino, Calif .- Rocky Graziano fue campeón mundial medio, también Carlos Monzón, Marvin Hagler, Carmen Basilio y Roberto Durán entre otros. Julio César Chávez no hubiera durado de pie ante cualquiera de ellos cinco rounds. Pero ninguno de ellos estuvo en el ring instalado en el Staples Center de Los Ángeles, el sábado pasado.
El que sí estuvo fue el germano Sylvester Zbik campeón interino que coronado monarca absoluto en una maniobra del Consejo Mundial de Boxeo para allanarle el camino a Julio Jr. El verdadero campeón de esa división se llama Sergio Martínez.
Zbik invicto en 30 peleas profesionales con solo 10 ganadas por nocaut subió al ring y brindó una buena actuación. Al final de los doce asaltos el triunfador por decisión mayoritaria y discutida fue el mexicano.
Yo pienso que Chávez Jr. ganó por un punto ya que ganó los tres últimos rounds de una pelea que iba perdiendo; y también porque desfondó al alemán con un golpeo al cuerpo que merecía al menos un descuento de dos puntos por parte del réferi que jamás se atrevió a sancionarlo e hizo caso omiso de los reclamos de Zbik.
En fin que lo que tenía que suceder sucedió. Sylvester solo ganaría si noqueaba y no tenía poder en sus puños de algodón.
Esto nos lleva a varias conclusiones. La primera es que Bruce Trampler, matchmaker de Top Rank, sigue siendo el número uno. Bob Arum es un zorro en el negocio y montó la batalla en el lugar donde Julio Jr. tenía todas las ventajas. Y a pesar de que el público no respondió como se esperaba se logró el objetivo.
Freddy Roach es simplemente un entrenador con suerte que no le ha enseñado nada nuevo al mexicano Chávez Jr. no es el ponchador que pregonan. No utiliza su estatura y alcance. No usa el jab. Jamás se desplaza con pasos laterales. No usa la cintura .En fin que su defensa no existe y su futuro no es nada positivo. Necesita con urgencia alguien que le enseñe y ese no es Roach. Tiene problemas de peso pues de 160 libras que peso el viernes se subió a 180 a la hora de la pelea, es decir que cuando sonó la primera campanada le llevaba al alemán 15 libras de tonelaje. ¿Es así como el Consejo Mundial de Boxeo protege a los peleadores?
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