Por Pablo Paniagua
Hace algunos años todos querían pelear contra Oscar De la Hoya. Hoy todos quieren hacerlo contra Manny Pacquiao Floy Mayweather.
Uno de ellos es S.S. Álvarez, apodado Canelo y ya muy conocido por sus pleitos y escándalos en la calle. El, por supuesto, niega todo y echa la culpa a alguno de sus hermanos, lo que resulta fácil pues tiene cinco y ya les compró peluca color zanahoria a todos ellos. Y se apresura a decir que ya está entrenando para hacerle frente a Floyd "Money" Mayweather en una pelea que le dejaría "mucho Money" al pelirrojo tapatío.
Entre sus planes no está contratar a un buen entrenador que lo ayude a buscar el triunfo, y mucho menos rodearse de un acondicionador físico, un médico, un nutriólogo y el personal especializado que usan ahora los atletas de alto nivel.
Todo eso no le interesa. El quiere dinero y perder no le importa, al cabo que hasta Sulaiman asegura que no tiene chance ante Floyd, pero que dará una buena actuación por su juventud y su estilo.
Nada más que Álvarez no está solo hay cuando menos media docena de mercenarios de los encordados que están dispuestos a recibir golpiza del moreno que ahora explota su personalidad de villano y el tagalo que es manejado como un Títere por Mr. Bob Arum.
La lista incluye a Miguel Cotto y al argentino Sergio "Maravilla" Martínez quienes están dispuestos a dejar de comer un par de meses para rebajar de peso con tal de percibir bolsas jugosas.
Hasta "Fantasma" Guerrero, peso ligero que perdió lo invicto ante Gamaliel Díaz, se candidateo ya a pesar de que nadie lo conoce y su mayor merito es ser ídolo de un pueblito californiano que apesta mucho pues ahí se siembra y se cosecha ajo. Y seguramente su aliento será el arma secreta que piensa utilizar durante el combate
Y tampoco es de extrañarse que Eric Morales también se apuntara en busca de un buen sueldo que sería sin duda una transfusión de mucho beneficio para su alicaída cuenta bancaria.
Nadie sabe quien o quienes serán los afortunados, pero si se sabe que los desafortunados serán los aficionados que tendrán que pagar por peleas que no quieren ver.
No hay comentarios:
Publicar un comentario